Uno de los manifestantes citado por CODESA, aseguró que en el ataque participaron miembros de las fuerzas auxiliares y de la policía con su uniforme y de paisano que "utilizaron diversas formas de represión, allanaron y registraron la tienda de campaña en la que se concentraba el grupo y confiscaron sus teléfonos móviles antes de ser expulsados".
Según la misma fuente, los agentes marroquíes de inteligencia "persiguieron a los manifestantes en las calles y callejones para alejarlos del Ministerio del Interior". El grupo de jóvenes saharauis inició una sentada el 13 de enero de 2012 para protestar contra "la política de discriminación" que hace el Estado marroquí contra los ciudadanos saharauis y para exigir puestos de trabajo en las zonas de su residencia en el Sáhara Occidental y en el Sur de Marruecos.
Fuente: CODESA.
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